Viaje al pasado
Cuando era pequeña solía jugar con mi padre en su flamante ordenador futurista – siendo honesta, no creo que fuera más allá del 486 – al Pac-man. Recuerdo que lo pasábamos muy bien juntos. El juego no tenía mucha complicación: manejabas con las teclas de direcciones, un laberinto, frutas, fantasmas, colores negros, verdes, naranjas muy llamativos y un sinfín de niveles.
Un nuevo juego
Cuando vi que lanzaban este juego fue inevitable recordar con añoranza aquella época, aunque sabía de sobra que con los avances que hay hoy en día el juego tendría poco -o nada- del original. Tenía claro que debía hacerme con una copia.
Así que lo compré de salida, abrí el juego – ¡me encanta el olor que desprende! -, lo metí en mi Series X y me puse manos a la obra.
La trama es sencilla: un malo – malísimo – secuestra a toda tu familia y debes rescatarlos uno a uno superando niveles cada vez más complejos.
Al comenzar te encuentras en una isla donde debes elegir fases. El juego es en 3D por lo que debes manejarte muy bien con la dirección porque hay un “frente y detrás”. Confieso que me han matado varias veces por no atinar con esto – manqueo a tope -, a medida que pruebas vas aprendiendo y mejorando tus habilidades.
Debes coger frutas para desbloquear puertas donde podrás encontrar diversos elementos que te ayudarán a salir de algún que otro rompecabezas: bola para ponerte la piel de acero o llaves para abrir las celdas de tus familiares. Además si coges determinados elementos desbloqueas niveles extra de laberintos en 3D con cierta dificultad.
Disfrute para toda la familia
Aunque al comienzo es sencillo, a medida que avanzas se va volviendo más y más difícil (es difícil ocultar mi odio a las fases de los payasos).
La banda sonora está basada en los temas clásicos pero con mezclas “chunta-chunta” que le da un toque muy moderno…. ¡y no quedan nada mal!
Además, una vez pasas el juego, desbloqueas el modo del laberinto del juego original (¡tiene logro para el más hábil!).
Conclusión
Pac-Man World Re-Pac es entretenido, lleno de retos que a medida que avanzas son más complejos y para toda la familia. He completado el modo historia (al 97%) y, si os gusta los juegos de plataformas, dadle una oportunidad. Sin duda alguna disfrutaréis como “enanos”.
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